Transporte Escolar

En febrero del año 2013, un estudio presentado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), reveló que la contaminación del aire daña más la salud humana de lo que se creía y confirmó que la exposición a las partículas suspendidas está relacionada con arterioesclerosis y con enfermedades respiratorias en niños, además de diabetes, problemas en su función cognitiva y en su desarrollo neuronal.

La situación en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) es muy grave en este renglón. El estudio Más de una década de aire sucio, 2000-2010, del CEJ, muestra que durante esos 11 años el parque vehicular en el AMG se incrementó en 112% y que durante esos mismos años tanto los niveles de ozono (O 3 ) como los niveles de partículas suspendidas (PM10) rebasaron las normas mexicanas de salud en 66% y 40% respectivamente.
(cfr. estudio en www.airedecalidad.org)
Gran parte de estos contaminantes atmosféricos los emiten los autos particulares, -más de un millón de autos y casi medio millón de camionetas según datos del 2012- (cfr. Inventario ciudadano de emisiones vehiculares 2012 para el AMG, del CEJ, en www.airedecalidad.org), muchos de los cuales hacen viajes a diario por motivos escolares, generando además congestionamientos y mayor carga vehicular. En Guadalajara, una de las ciudades de América Latina con mayor tasa de motorización, buscamos proteger a los niños llevándolos de manera individual en coche o camioneta a la escuela, y con ello empeoramos la calidad del aire que tanto ellos, como todos los demás, necesitamos para respirar.

Gran parte de la solución a esta problemática compleja y multifactorial puede seguir un camino exitoso si de manera colectiva logramos promover una movilidad escolar en el AMG, que cuente con un sistema de desplazamientos eficientes, seguros y de bajo costo económico y social.

Necesitamos padres de familia, maestros e instituciones educativas entusiastas y de vanguardia, que impulsen el proceso de socialización sobre el papel protagónico que las escuelas pueden y deben tener en la promoción del Transporte Escolar como parte de la movilidad sustentable que el AMG requiere para proteger tanto la salud infantil como la de la población en general y para avanzar hacia una mejor calidad de vida. De hecho, hay colegios pioneros que actualmente tienen en marcha servicio de transporte escolar y otras iniciativas afines.

Cabe recordar que los niños respiran más veces por minuto que los adultos y que sus pulmones se acabarán de desarrollar por completo hasta los 18 años: exponerlos al aire sucio puede tener consecuencias para el resto de su vida, disminuyendo su capacidad de aprendizaje y su resistencia física, entre otros impactos negativos.